La batalla legal por la tutela legal de Britney Spears parece haber llegado a su fin. Su padre Jamie Spears acordó que "debe dejar su puesto", según declaraciones del abogado de la cantante, Mathew Rosengart. 

El padre de Britney se ha ocupado de sus asuntos desde 2008, cuando ella enfrentó una serie de problemas de salud. 

Sin embargo, la cantante, de 29 años, trató desde hace meses de recuperar su autonomía y por eso había iniciado los proceso legales. 

Rosengart aseguró que el acuerdo de Spears es un gran paso para hacer justicia en el caso de Britney.