Por primera vez en años, el actor estadounidense James Franco habló extensamente sobre las acusaciones por acoso y abuso sexual que se formularon en su contra. En una entrevista para el podcast The Jess Cagle de SiriusXM, el intérprete dio a conocer su adicción al sexo y admitió que se acostó con estudiantes de su antigua escuela de teatro.
Franco, que ha estado en recuperación desde 2016, explicó por qué permaneció en silencio durante tanto tiempo pese a las duras denuncias que pesaban sobre él por parte de cinco mujeres, cuatro de las cuales eran sus estudiantes de actuación, en un artículo publicado por The Los Angeles Times en enero de 2018. Ese mismo mes, una de las presuntas víctimas, Sarah Tither -Kaplan, denunció que el actor “abusó de su poder explotando a las mujeres no famosas con las que trabajaba con el pretexto de darles oportunidades”.
En ese momento, el actor respondió a las acusaciones de sus ex alumnas alegando que estaban “hambrientas de atención”. Franco abrió su escuela de teatro, Studio 4, en Los Ángeles, en 2014 y cerró sus puertas en 2017 tras las denuncias en su contra.
Pero ahora el actor aceptó sus errores del pasado. Admitió que pensaba que tener sexo con estudiantes de su escuela de actuación era aceptable porque era un acto “acordado” entre adultos, pero negó explotarlas sexualmente.
“Admito que me acosté con estudiantes y eso estuvo mal. Nunca debió haber pasado”, dijo. ”Supongo que en ese momento, mi pensamiento era si era consensuado, está bien”.
“No quería lastimar a nadie”, dijo Franco, de 43 años, en la entrevista. “En 2018, hubo algunas quejas sobre mí y, en ese momento pensé que tenía que quedarme callado. Tenía que hacer una pausa. No parecía el momento adecuado para decir nada. Había gente que estaba molesta conmigo y necesitaba escuchar”, continuó en su descargo.