El cineasta Jordan Grahan registró el momento en que su abuela abre lo que ella creyó que era un iPhone, su reacción inicial no fue nada placentera.
"¿Es un chiste?", pregunta cuando quita el papel de regalo. "El problema es que no estoy hecha para manejar esto. Yo tengo una línea fija en casa. Supongo que ya nadie sabe lo que es eso".
Pero Graham le dice que le de una probada al teléfono, es entonces cuando la señora se da cuenta que se trata de chocolate. Su ánimo cambia instantáneamente y exclama "Gracias a Dios, bendito seas".