Derek Chauvin, de 45 años, había sido declarado culpable por tres cargos de homicidio en abril por la muerte de George Floyd.
El expolicía Derek Chauvin fue sentenciado este viernes a 22 años y medio de prisión por la muerte de George Floyd.
La pena impuesta es inferior a los 30 años que habían solicitado los fiscales.
Con buena conducta, Chauvin, de 45 años, podría salir en libertad condicional tras cumplir dos tercios de su condena, es decir, unos 15 años.
Durante la audiencia se escuchó la voz de Chauvin, en uno de los pocos comentarios públicos que ha hecho desde que ocurriera el incidente que llevó a la muerte de Floyd.
El exagente de Minneapolis ofreció sus condolencias a la familia de la víctima.
“Habrá más información en el futuro que les será de interés, y espero que estas cosas los dejen más tranquilos”, agregó Chauvin durante su declaración.
Previo a los comentarios de Chauvin, varios miembros de la familia de Floyd hicieron sus declaraciones, incluyendo la de su hermano Philonise Floyd, quien le pidió al juez que emitiera la “máxima sentencia posible”.
Chauvin, exagente de la policía de Minneapolis, fue declarado culpable por tres cargos de homicidio en abril por la muerte de Floyd.
Los detalles de la muerte de George floyd
Floyd, de 46 años, murió el 25 de mayo de 2020 después de ser arrestado por sospecha de haber pagado una cajetilla de cigarrillos con un billete falso de $20 en un minisúper. Entró en pánico, aseguró que era claustrofóbico y forcejeó con los policías cuando intentaron introducirlo en la patrulla. Fue sometido contra el suelo.
La pieza central del caso fue el video que captó un testigo y en el que se ve a Floyd diciendo en repetidas ocasiones “no puedo respirar”, mientras las personas reunidas alrededor de la escena le gritaban a Chauvin que dejara de presionar su rodilla contra el cuello del hombre durante cerca de nueve minutos y medio, según las autoridades. Floyd fue perdiendo el conocimiento poco a poco.
El jurado, integrado por seis personas blancas y seis negras o multirraciales, rindió su veredicto después de deliberar unas 10 horas durante dos días. Chauvin fue declarado culpable de tres cargos: homicidio involuntario, homicidio doloso en tercer grado y homicidio no premeditado en segundo grado.
El presidente Joe Biden acogió el veredicto, y declaró que la muerte de Floyd “fue un asesinato a plena luz del día, y le quitó la venda de los ojos a todo el mundo”, para poder ver el racismo sistémico.