La fuerte nevada comenzó el viernes en más de 20 estados afectando a unos 85 millones de personas. En Kentucky, donde se registró la mayor nevada, miles de conductores quedaron varados en un congestionamiento de 56 km, según informa la BBC.

Al menos nueve personas han muerto y se han declarado emergencias en 10 estados. Miles de hogares quedaron sin electricidad.

Las escuelas y las oficinas del gobierno federal cerraron temprano el viernes, igual que el sistema de transporte público. Las aerolíneas también cancelaron más de 7.000 vuelos el viernes y el sábado, según FlightAware.com.

Se prevé que para cuando la tormenta haya pasado, el domingo, la capital del país, Washington, quedará cubierta por hasta 76 cm de nieve.

"Quiero ser muy clara con todos. Esta es una tormenta enorme", dijo la alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, cuando la ciudad se preparaba para enfrentar una de las peores tormentas de su historia.

"Tiene implicaciones de vida o muerte y todos los residentes del Distrito de Columbia deberían tratarla de esa manera", agregó.

La tormenta de nieve sobre Washington podría ser más fuerte que una que se produjo en 2010, bautizada como "Snowmageddon", que dejó 45,2 centímetros de nieve, según advirtió el meteorólogo de AccuWeather Alex Sosnowski.

Seis personas murieron en accidentes de auto como consecuencia de las difíciles condiciones en Arkansas, Tennessee y Kentucky. Solo en el estado de Carolina del Norte se han producido más de 1.000 choques de vehículos.

En Nueva York, la acumulación de nieve podría alcanzar los 30 centímetros el sábado, con rachas de viento de hasta 80 kilómetros por hora.