El gobierno de Nicaragua requirió los bienes de la clausurada embajada de Taiwán en el país y los reasignó a la República Popular de China, anunció la Procuraduría General de la República a través de un comunicado divulgado el 26 de diciembre en medios oficiales.

Las Instalaciones de la Embajada de Taiwán habían sido ofrecidas a la Arquidiócesis de Managua, según dijo a CNN una autoridad de la Iglesia Católica en Managua.

"El reconocimiento de parte de un Estado, de la realidad de una sola China, como ocurrió en el caso de Nicaragua el 9 de diciembre de 2021, implica el inmediato registro de todos los bienes inmuebles, equipos y bienes a favor del Estado reconocido, la República Popular de China, con absoluta e irrestricta propiedad y dominio", expresa el comunicado de la Procuraduría.

La publicación del documento responde directamente a lo expresado del vicario general de la Arquidiócesis de Managua, monseñor Carlos Avilés, quien en declaraciones al diario La Prensa afirmó que, antes de irse del país, la misión diplomática de Taiwán le ofreció a la arquidiócesis todos sus bienes, entre ellos la que era su sede diplomática. Una fuente de la Iglesia Católica en Managua dijo a CNN que la entrega no se había concretado aún, y que estaban a la espera de información.

Por el contrario, el comunicado de la Procuraduría afirma que, de acuerdo con la legislación nicaragüense, "no caben transacciones, traslados o traspasos, entre estas supuestas donaciones, cuya intención solo evidencia la naturaleza ilegal de quienes pretenden con maniobras y subterfugios apropiarse de lo ajeno".

La Procuraduría advirtió que las entidades que insistan en reclamar la donación de las mencionadas instalaciones podrían enfrentar un juicio: "Aquellas entidades que insistan en ilegítimos e ilegales reclamos quedarán expuestas a los tribunales y acciones judiciales correspondientes".

Por su parte, a través de un comunicado, el Ministerio de Relaciones exteriores de Taiwán "condenó las acciones gravemente ilegales" del gobierno de Nicaragua, al ordenar el cierre de la embajada en Managua y obstruir la venta simbólica de la propiedad a la Iglesia Católica.

La Iglesia Católica mantiene tensas relaciones con el gobierno del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, desde las protestas de 2018. En reiteradas ocasiones, llamó "golpistas" a los obispos que actuaron como mediadores en un primer intento de diálogo con la oposición para buscar soluciones a la crisis que enfrenta el país.

El Gobierno de Nicaragua rompió relaciones con Taiwán el 9 de diciembre a través de una declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores. A pesar de que se trataba de uno de sus principales donantes, aseguró que "la República Popular de China es el único gobierno legítimo que representa a toda China y Taiwán es parte inalienable del territorio chino". Taiwán lamentó la decisión, considerando que la cooperación beneficiaba al pueblo de Nicaragua.