Las autoridades estadounidenses anunciaron el descubrimiento de un sofisticado túnel transfronterizo utilizado para distribuir 1.762 libras (unos 799 kilos) de cocaína desde México hasta en EE.UU.
Se calcula que el paso subterráneo, que se extiende desde la ciudad mexicana de Tijuana hasta un depósito en Otay Mesa, en California, tiene aproximadamente 1.744 pies de largo (531 metros), 61 pies de profundidad (18,5 metros) y 4 pies (1,2 metros) de diámetro.
La estructura cuenta con paredes reforzadas, un sistema de rieles, electricidad y un mecanismo de ventilación.
Las autoridades informaron de la detención de seis personas, con edades entre 31 y 55 años. Todas ellas han sido arrestadas por tráfico de cocaína y dos por comercializar con metanfetamina y heroína. Además de la cocaína incautada, los agentes encontraron 164 libras (74 kilos) de metanfetamina y 3,5 libras (1,5 kilos) de heroína.
Seis detenidos
El túnel fue descubierto el pasado viernes cuando varios funcionarios vigilaban una residencia que había sido usada para esconder drogas en National City, al sur de San Diego.
Los agentes vieron salir a varios de los sospechosos, que se dirigieron a un almacén. Finalmente, la Policía les detuvo y al registrar el almacén no encontraron drogas, pero sí descubrieron la entrada al túnel en el suelo.
"Ya no hay luz al final de este narcotúnel", declaró el fiscal federal Randy Grossman. "Derribaremos todas las rutas subterráneas de contrabando que encontremos para evitar que las drogas ilícitas lleguen a nuestras calles y destruyan a nuestras familias y comunidades", añadió.
Según las autoridades, desde 1993 se han descubierto 90 túneles en la región del distrito sur de California y, entre ellos, 27 se consideraron sofisticados.