Muchos de los asistentes portaron pancartas y gritaron consignas pidiendo la renuncia de la funcionaria, según informó la cadena CNN.

 “Ya no queremos corruptos aquí, estamos hartos de esto , el pueblo está cansado. Son décadas  y décadas y décadas”, gritaban algunos de los manifestantes, mientras otros vociferaban “a la cárcel , a la cárcel”. 

Según los organizadores, unas 20.000 personas se congregaron en la plaza, y más de 30.000 si se cuentan las calles aledañas, aunque no hay cifras oficiales. 

Al llamado, que se realizó a través de las redes sociales, acudieron ciudadanos de todas las edades, incluso gente en sillas de ruedas y hasta niños acompañando a sus padres.

 “Yo vengo desde Tecpan. Ahí hay mucha gente pobre , todo el dinero que les pertenece a los pobres se lo están robando. Estamos indignados", dijo uno de los manifestantes. 

 “El pueblo está harto y aburrido; es el gobierno más corrupto de la historia. Este pueblo se ha vuelto un narco estado”, señaló el señor Francisco García. 

Gran parte de los estudiantes eran universitarios que realizaron una marcha desde su casa de estudios para luego unirse a la manifestación. 

Un dirigente universitario dijo que "el pueblo de Guatemala no son esos políticos corruptos; el pueblo de Guatemala somos nosotros: pueblo trabajador que lucha por el día a día”.

 El escándalo se destapó el jueves 15 de abril cuando las autoridades, con la ayuda de la Comisión Internacional Contra la Impunidad (CICIG) revelara la existencia de una presunta red de defraudación aduanera que subfacturaba y evadía impuestos.  

Como supuesto cabecilla de esta red, denominada “La Línea” fue señalado por las autoridades Juan Carlos Monzón, secretario privado de la vicepresidenta Roxana Baldetti. Monzón tiene pendiente una orden de captura internacional.  

Para el analista Alvaro Velásquez, ésta es la peor crisis que ha tenido que enfrentar el actual gobierno. 

"Lo que tenemos en puerta es la mayor crisis política de este gobierno, y no solo del gobierno sino que ya se evidencia una crisis estructural del estado donde hay una mediación… una crisis de mediación  entre la clase política y la ciudadanía", afirmó Velásquez. 

El portavoz del gobierno dijo el viernes que respetaban el derecho de los ciudadanos a manifestarse.