A más tardar la última semana de este mes, los elementos de la corporación policial deberán realizar una prueba física consistente en el test de Wells, flexión de brazo, abdominal y prueba de resistencia en una carrera de seis minutos, como parte del Plan Integral de Salud Física y Mental, indicó el director Mauricio Arriaza Chicas, a través de un memorándum.
Por su parte, el Movimiento de los Trabajadores de la Policía criticó que la prueba tenga un carácter obligatorio cada tres meses y consideran que no es objetiva ni busca promover la salud física.
“Primero hubieran promovido un chequeo médico completo a cada trabajador, luego una evaluación psicológica objetiva para ver la salud mental y luego ordenar que se les realice la respectiva actividad física de acuerdo a la capacidad de cada persona. Con esto se podría prevenir sobrepesos, enfermedades y suicidios”, indicó el movimiento.