Esta detención se logró por la constante y efectiva coordinación entre Interpol El Salvador y la Oficina de Detención y Deportación (ICE) del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
Roberto Carlos Silva Pereira era el propietario de una empresa constructora y en el 2005 ofertó servicios de construcción de caminos a alcaldías del país, proponiendo contratos fraudulentos para ser favorecido en las adjudicaciones, entregando posteriormente dinero como soborno.
El 5 de octubre de 2007, Silva Pereira fue detenido en el estado de Arizona, en Estados Unidos por oficiales del Buró Federal de Investigaciones (FBI) luego que ingresara de forma irregular a ese país. Estuvo bajo custodia de las autoridades de la Oficina de ICE.