Tanto las personas como las unidades vehiculares en las diversas fronteras terrestres y carreteras adyacentes son registrdas contrarrestar el paso de drogas u otros ilícitos, como parte de las acciones del Plan Control Territorial.
El agente canino Edo, junto con su guía, trabaja en la frontera El Amatillo, en La Unión, en largas jornadas de registros de vehículos de carga que trasladan distintas clases de mercaderías.
Su prioridad es hacer los registros exhaustivos para evitar el ingreso de estupefacientes , aseguran autoridades de la División Antinarcóticos (DAN). De igual manera, la Unidad Canina mantiene presencia en el resto de fronteras terrestres, marítimas y aéreas del país.