El doctor, Jorge Panameño señaló que el antiviral adquirido por el Gobierno, no debe ser repartido a diestra y siniestra, sino asegura que debe usarse en pacientes que cumplan criterios específicos.
En su cuenta de twitter el doctor escribió:
“El 21 de Diciembre de 2021 la FDA aprobó en carácter de emergencia el uso Molnupiravir, un antiviral análogo de los nucleotidos, para su uso en pacientes con COVID 19 de leve a moderado, de forma temprana, esto es no más de 3 a 5 días después de iniciados los síntomas”.
A lo anterior agregó que debe ser usado por pacientes mayores de 18 años, las mujeres que lo usen, no deben estar embarazadas o en período de lactancia, además, señala que deben poseer factores de riesgo para desarrollar enfermedad grave que conduzca a la hospitalización o a la muerte.
“Es decir no es para cualquiera, que sólo tenga una prueba positiva, mucho menos para ser distribuida en forma masiva”, acotó el experto.
Panameño aseguró que el antiviral, es un medicamento de uso delicado. Esto porque, según sus conocimientos, actualmente se trata de un medicamento experimental, que se encuentra en fase 3 de investigación, por lo que no conocen totalmente ni los efectos colaterales ni las interacciones farmacológicas, por eso no cumple con los requisitos para obtener la licencia plena. “Es una autorización de emergencia y su uso debe ceñirse a esta condición”, escribió Panameño.
El doctor explicó porque el medicamento no es compatible con el embarazo, ni prescrito para niños.
En el primero de los casos, Panameño, asegura que el antiviral por su mecanismo de acción, actúa sobre el genoma viral, impidiendo su multiplicación, esta es la razón por la que está contraindicado en el embarazo, ya que esto es una causa importante de teratogenesis, es decir puede causar malformaciones congénitas. ¿Por qué no se usa en niños?
Se acuerdo a Panameño, el medicamento no se puede usar en los niños porque interfiere con la formación de músculos y huesos.
El médico agregó que un estudio recientemente publicado en la Revista NEJM, mostró una reducción del 30% en riesgo de morir o ser hospitalizado
en personas no vacunadas, además, criticó la distribución masiva, pues asegura que este es un medicamento que sólo puede y debe utilizarse bajo supervisión médica cercana, ya que su uso es de riesgo.
Por lo qué aseguro que “Sin duda en este momento la forma de distribución no obedece a criterios médicos técnicos, sino a otros objetivos no sanitarios, como ha sido durante toda la pandemia en este país”, enfatizó Panameño.