Si hablamos de la relación de Camila Cabello con los paparazzis podemos decir que es pésima, y es que estos insistentes fotógrafos se han empeñado en captarla en todos los lugares, sobre todo cuando va a la playa, y todo desde esa recordada serie de fotos en las que la artista evidenciaba una figura distinta a la de antaño.

Y, pese a que ella salió a defenderse y a decir que se sentía cómoda con su propia piel y apariencia, los paparazzis no se detuvieron y comenzaron a captarla en cualquier lugar, saliendo de casa, paseando con sus mascotas, y, nuevamente, yendo a disfrutar de un día de playa en Miami.

Pero ahora, luego de unas fotos captadas recientemente, la cantante decidió desahogarse y hacer sus descargos en redes sociales para evidenciar la molestia que ha enfrentado cada vez que los paparazzis la fotografían cuando usa bikini o muestra algo más de piel.

Y es que Camila dice que todas estas imágenes la hacen sentir insegura, sobre todo por el qué dirán y los comentarios que aparecen en redes sociales y en los medios respecto a su apariencia.

Comentarios maliciosos que no hacen más que dañar su autoestima y privacidad.

Y el descargo lo hizo a través de sus propias redes sociales con una extensa publicación.

“Hoy me compré un bikini nuevo, me puse brillo labial y no comí nada demasiado pesado antes de ir al mar, porque sabía que básicamente sería una sesión de fotos completa (…) Cada vez que he ido a la playa en Miami he sido fotografiada a escondidas y me he sentido muy vulnerable y sin preparación: usé bikinis que eran demasiado pequeños y pegados al cuerpo. No me preocupé de cómo me veía. Después, veía las fotos en internet y los comentarios, y me molestaban mucho.

. “Cuando afectó mi autoestima, recuerdo cuánto me impactó darme cuenta de que estaba pensando en la cultura de pensamientos ajenos y no en los míos. Una cultura que se ha acostumbrado a una imagen de cómo debe ser el cuerpo de una mujer ‘sana’ que no es, en absoluto, real para muchas mujeres. Photoshop, alimentación restrictiva, exceso de ejercicio, elección de ángulos que hacen que nuestros cuerpos se vean diferentes. Debo seguir a las mujeres que aceptan su celulitis, estrías, hinchazón y fluctuaciones de peso… y muchas cosas más.

Todavía no estoy en el punto de mi viaje donde no me importe una mierda. Cuando lo pienso intelectualmente yo sé que mi físico no determina lo saludable, feliz o sexy que soy. Emocionalmente, el mensaje que recibo de la sociedad suena fuerte en mi propia cabeza. Irónicamente, toda la terapia, todo el trabajo interno va encaminado a tratar de volver a sentirme como mi yo de 7 años en la playa. Estoy de luto por ella hoy “.

Así mismo, la cantante confesó que a pesar de saber que lucía bien en ese bikini, no pudo evitar sentirse insegura ante los posibles comentarios en los medios y redes sociales, por lo que ese fue el peor día de su vida en la playa.

Ya está harta de que los paparazzis no la dejen disfrutar tranquila de su tiempo fuera del ojo público.

Se aparecen hasta en su jardín.