Mientras la administración de Biden se apresura a reubicar a miles de migrantes haitianos acampados en una pequeña ciudad fronteriza de Texas, también está buscando un contratista privado para ayudar a operar un centro de detención de migrantes en la base naval de los EE. UU. En la Bahía de Guantánamo, Cuba, y para contratar al menos a algunos. guardias que hablan español y criollo haitiano.

El Departamento de Seguridad Nacional insiste en que no hay planes de trasladar a inmigrantes haitianos desde la frontera entre Estados Unidos y México a la bahía de Guantánamo, donde Estados Unidos ha alojado durante mucho tiempo a los solicitantes de asilo encontrados en el mar.

Aún así, la solicitud de contrato publicada la semana pasada ha alarmado a algunos defensores de los inmigrantes, que ya son críticos con la decisión de la administración Biden de expulsar rápidamente a más de 1.000 migrantes haitianos a un país que aún se recupera de los desastres recientes.

Según la solicitud de contrato, la instalación en la Bahía de Guantánamo "tendrá una población diaria estimada de 20 personas". Pero el proveedor de servicios debe estar preparado para "erigir viviendas temporales para poblaciones que superen los 120 y hasta 400 migrantes en caso de aumento. Este equipo incluye tiendas de campaña y catres, y el contratista debe poder tenerlos ensamblados y listos con poco aviso". . "

La solicitud especifica que "al menos el 10% del personal aumentado debe dominar el español y el criollo haitiano. El transporte aéreo desde y hacia las instalaciones es responsabilidad exclusiva del proveedor de servicios".

Desde los ataques del 11 de septiembre, la Bahía de Guantánamo ha sido conocida principalmente como el sitio de una prisión militar estadounidense donde algunos detenidos han estado retenidos durante años sin juicio.

Pero la base naval también alberga un centro de detención de inmigrantes del DHS. A principios de la década de 1990, la base fue utilizada como campo de refugiados para los haitianos que huían en barco después de que el presidente de Haití elegido democráticamente, Jean-Bertrand Aristide, fuera depuesto en un golpe militar.

En su apogeo, el campo de refugiados albergaba a más de 12.000 haitianos en lo que los defensores de los derechos de los inmigrantes describieron como condiciones deplorables.

"Enviar a las personas que buscan protección a un lugar que es conocido por ser tratado como una zona libre de derechos es lo último que debe hacer la administración de Biden", dijo Eleanor Acer, directora de protección de refugiados de Human Rights First, una organización sin fines de lucro. . "No es más que un intento descarado de evadir la supervisión, el debido proceso, la protección de los derechos humanos y las leyes de refugiados de Estados Unidos".

Pero el DHS insiste en que la solicitud no tiene nada que ver con la situación en Del Rio, Texas, donde los migrantes han cruzado a Estados Unidos.

"[DHS] no envía ni enviará a ciudadanos haitianos que se encuentren en la frontera suroeste al Centro de Operaciones Migratorias (MOC) en la Bahía de Guantánamo", escribió Marsha Espinosa, subsecretaria de asuntos públicos del DHS, en Twitter.

La solicitud es simplemente "un primer paso típico y de rutina" en la renovación de un contrato, escribió.